GASTRONOMÍA, TURISMO Y CULTURA. Sondeando el espacio ibicenco Come Ibiza dio con un joven escritor que ha publicado su primera novela en 2011. Se trata de Jordi Pereyra Marí, autor de la novela El proyecto Wormhole, su primer libro, basado en el mundo de ciencia ficción. En la onda del Blog Come Ibiza, llamado Odisea en el espacio, encontramos al «terrícola» perfecto para sugerirle que nos hablara de la isla.
Estudiante de Ingeniería Industrial Mecánica en Barcelona, Jordi Pereyra nació en Ibiza hace 22 años. Su novela, que comenzó a escribir a los 12 años (según asegura), está editada por Atlantis. En ella, los protagonistas se verán arrastrados a otra dimensión por un «agujero gusano artificial que conecta mundos paralelos», cuenta vía mail. Admirador de científicos como Douglas Adams, Edwin Abbott, Isaac Asimov y George Orwell, dedicó a la página el pasado mes de junio este relato en el que habla de sus recuerdos y su relación con la cocina ibicenca. Dadas sus buenas dotes para la escritura, también la de carácter gastronómico, esperamos volver a degustar en alguna otra ocasión otro delicatessen como éste que reproducimos a continuación.
Relato de Jordi Pereyra para Come Ibiza
“Uno de los recuerdos más singulares de mi temprana infancia está dominado por una montaña humeante de arroz dorado por la que asoman varias extremidades de crustáceos y trozos de carne de dos o incluso tres tipos de mamífero diferentes. Al fondo, asomando a los lados de este monumento dedicado a la gula, pueden distinguirse las olas rompiendo contra la playa de Sa Caleta, la que recibió a los primeros colonos fenicios que habitaron la isla y la misma que da nombre al restaurante ibicenco en el que mis padres intentan sacarme de la boca una pata de cangrejo. Por suerte, las paellas hipervolúmicas no son las únicas que persisten en mi memoria. Una gran cantidad de recetas centenarias ibicencas han sido degustadas por mis papilas y la experiencia ha sido tan notable que quiero compartirla para que los potenciales turistas que decidáis pasar las vacaciones en la Ibiza vengáis pensando en consumir algo que no sea alcohol y comida rápida.
Como cantamañanas culinario, puedo decir que la cocina ibicenca nace de la necesidad, alejándose de la vanidad y frugalidad que caracterizan la cocina moderna. Es decir, sacia el apetito a la vez que complace el paladar con un característico toque artesanal resultado de la combinación de una gran variedad de ingredientes heredados de las diferentes culturas que han habitado la isla a lo largo de la historia. El pescado fresco, las hortalizas mediterráneas y la carne criada al aire libre en estas tierras privilegiadas se combinan para deleitar todos nuestros sentidos, menos el oído, de la mano de platos sencillos y cuidados como el bullit de peix, el sofrit pagès, las paellas, ensaladas, los quesos y los embutidos o postres exclusivos de la isla al estilo del flaó, la greixonera o las orelletes. En definitiva, como autor ibicenco de ciencia ficción y uno más de los 129.562 afortunados que ha tenido la suerte de nacer en esta isla mágica, me gustaría compartir con el lector la personalidad ibicenca oculta tras la sombra de las macrodiscotecas, reflejada en gran parte en su gastronomía”.
(Jordi Pereyra Marí)
* En la imagen, portada de El proyecto Warmhole (Ed. Atlantis, 2011).