GASTRONOMÍA. El nuevo restaurante La Belle Ibiza sorprende en una nueva temporada desde el corazón de la isla con una deliciosa carta con cenas y espectáculo en San Rafael. Su especialidad es la cocina-fusión asiática con un toque afrancesado, que sus propietarios cuidan al detalle y acompañan de selectos vinos de la enoteca Eivins. La amplia terraza, con camas balinesas y un privado, acoge sesiones de danza sensual, conciertos, espectáculos infantiles… Es la nueva sensación en Ibiza.
Asia y Francia en el plato
La Belle Ibiza es un amplio local diáfano, de cerca de 700 metros cuadrados, asentado sobre el espacio que ocupó el famoso restaurante El Ayoun. Sus nuevos dueños, Arnaud Lauris y Sabine Pena, se encargaron de realizar una reforma integral, dándole un nuevo aire, y aportándole un espíritu ibicenco. Hoy, este fabuloso espacio cuenta con un gran comedor con moderno mobiliario y una zona de barra para coctelería. Al descubierto encontramos está la amplia terraza con un privado ambientado a modo de jaima. Cerca, otra pequeña zona de camas balinesas. En la zona de mesas las cenas nocturnas (no sirven comidas) resultan mágicas, acompañadas de sesiones del dj Tom Costino.
La carta de La Belle Ibiza ofrece sabrosos aperitivos o tapas para compartir, con un toque asiático y otras de cocina española de mercado: desde unas gambas en tempura a un crujiente de pollo o unas croquetas de mollejas de ternera. Todo ello, exquisitamente presentado en el plato. Hay tablas de jamón de bellota y surtido de quesos o bien un especial Sabores del mundo, que reúne tartar de salmón, croquetas con trufa o hummus con verdura crujiente.
Entre los entrantes cabe destacar una especialidad de la casa como La Belle Trilogía (tartar de atún con foie gras, carpaccio de vieiras y guacamole), el ceviche de mero con cilantro y espuma de yuzu o el carpaccio de bresaola (carne de ternera curada). Entre los platos principales, sin duda, hay otras dos especialidades estrellas: la Pluma de bellota con reducción de Oporto y crema de patatas y el Bouillabaisse con leche de coco, que lleva pescado, marisco y arroz basmati, para mezclar al gusto en un plato en forma de bol. También hay paleta de cordero confitada y ahumada con tomillo y chuletón de buey madurado o un lenguado estilo meunière con verduras, raviolis o un risotto de quinoa. Una de los platos estrella es también la hamburguesa de ternera wagyu de La Belle Ibiza.
La selecta carta de vinos de La Belle Ibiza es obra de la enoteca Eivins, situada en San Antonio (también vende vía web). Acoge cavas, champán (desde un Ruinart Rosé a un Dom Pérignon), tintos, blancos chardonnay de Navarra o rosados ibicencos de Ibizkus y otros galos con denominación, como Côtes de Provence. Además, vino en copa o jarra y combinados como la sangría de cava.
La Belle sorprende también con un menú infantil ofrece un crujiente de pollo (con verduras o patatas fritas), la kids burguer (hamburgesa para niños) y la pasta con salsa napolitana. De postre un “helado divertido”. Los postres son también delicatessen. Especial mención merecen el París-Ibiza (fruta con frambuesa y espuma de chocolate blanco), el tiramisú con nutella y las bolas de chocolate con haba tonka (una semilla aromática) o el refrescante milhojas con vainilla de Madagascar. Hay también helados y sorbetes de sabores.
Cabaret Pigalle y circo familiar
Los martes, un auténtico espectáculo de cabaret al más puro estilo Pigalle de París llega a este moderno restaurante, en el que bailarinas profesionales despliegan sus encantos entre los comensales. Los jueves toca sesión de circo familiar, con intérpretes que proceden del mundo circense, una tradición muy arraigada en la cultura francesa. Las sesiones nocturnas se amenizan con relajadas sesiones de dj´s, con lo último en house o música retro de bandas y solistas franceses. Modernidad y tradición confluyen en esta delicioso local ibicenco imprescindible.
La reforma de La Belle Ibiza es obra del arquitecto Jaime Serra, del estudio ADV, Atlant del Vent, y el interiorismo es obra de la ibicenca Rebeca Pérez, autora de otros proyectos en la isla. Se revistieron paredes y suelos, especialmente el pavimento de la terraza (con una buena elección en tono perla), y se dividieron las zonas de interior y exterior con una gran cristalera para no restar visibilidad desde dentro o fuera del restaurante. En la zona de acceso se situó una tienda de ropa, La Belle Boutique, con diseños de creadores ibicencos. El resultado es un espacio redondo donde disfrutar de una exquisita cena, hacer compras a la última o presenciar un animado espectáculo casi cualquier día de la semana.